Wendy
— Bebé milagro —
Quedé embaraza a los 19 años y desde mis primeras consultas prenatales me decían que tenía la presión un poco alta pero que todo estaba bien. Cada mes subía mucho de peso, me decían que debía cuidar mi alimentación y tenía fuertes dolores de espalda pero decían que era por “el peso de mi bebé”. Los pies se me hinchaban tanto que no me quedaban los zapatos, cosa que le atribuían a que estaba muy gordita (hinchada).